¡Ante todo buenas noches!, no sea cosa que nos jacten de maleducados, porque cuando aún no nos conocemos tenemos que ganarnos la confianza. Uno no puede ir en la vida topeteandose a la gente a si porque si, todo lleva su tiempo, acaso nunca les pasó llevarse más de una sorpresa cuando vieron a alguién y dijieron, y cito: … “A este es un dologu, no les des bola”, “Este no vale dos pesos”; o los otros tales como “me encantó”, “me enamoré de esta persona”.
Las cosas a veces no son tal y como las imaginamos, que sabemos si esa chica tan bonita que hablaste desde el Patio Civico hasta 7 y 48, no tiene las uñas largas, se baña dos veces a la semana, y tiene el mal habito de reventar los granitos de las personas que tiene alrededor.
O ese pobre chico que esta ahí sentado que pareciera que nunca le pasa nada interesante, quien te dice que ese chico sabe hacer mas cosas que Mac Giver atado a una silla. Si las apariencias engañan, pero para ello nosotros nos hemos esforzados para que nuestra primera vez con ustedes sea la mejor posible, dentro de lo que hay obvio.
La primera vez en cualquier persona es el momento más duro que atravesamos, sea en el area que sea. La primera ves que se te cae un diente es un suceso doloroso, pero recompensado por ese Ratón Perez, que si le dejas un diente te deja una moneda debajo de la almohada; lastima que ya no me quedan dientes, y la última noche el ratón me dio vuelta la casa de arriba abajo porque no tenía ningun diente.
La primera vez que te toca hacer un trámite solo, y te topas con una peregrinación de gente haciendo colas de gusto, es un momento feo. Y la primera vez?... Si saben de que primera vez hablo, una descicion importante y que lo fueras, hasta que simplemente pasa ese momento, que le digo?, me dejo las medias?, pero… hay me transpira la mano, porque comi panchos con picante, si le doy un beso la mato por intoxicación. Estas son cosas que nos preguntamos a diario, pero como gente con cancha jamás vamos a reconocerlo, aunque estemos sudando miedo y nuestras patas tiemblen que nosotros reconoscamos nuestros miedos es tarea imposible.
Inventamos las cosas más extravagantes con tal de ser vistos, compramos las mejores marcas, andamos en rodados lujosos o tuneados, y si es necesario peinamos nuestro pelo y nos afeminamos un poco para parecer sensibles… si sensibles! Ese pilar de 120kg grande como una heladera con freezzer, que veias riendose mientras le pisaba la cabeza a un pobre pibe que mide metro y medio y pesa 60kg, es capas de llorar arrastrase con tal de que esa chiquilla diga Ah pobresito!, y ahí zas al cogote cual vampiro a sacarle lo que fuera.
Y cuando es una cita a ciegas?, aca viene lo divertido: “¿Qué tenes puesto?, Hay que sensible que sos (el Pilar sigue robando con eso), me encanta hablar con vos… todo eso termina esa primera vez, como si fuera el programa de Cupido uno pone dia, lugar, hora y planifica todo, a veces viene acompañado, para hacerse el boludo en caso de encontrarse con el Yeti o con Mangila Gorila, de golpe el que se llamaba Cacho puede llamarse Ruben en un santiamen y vicebersa, ese si que es un momento de nervios.
Otra clásica: el día que conoces o presentas al noviecito/a a tus padres, ¡Qué momento!, por dios, cuantos nervios, cuanto protocolo, mientras amasamos ese gas que te produjo el guiso imundo de tu suegra, porque tu suegro te clavó la vista y no quiere dejarte de ver, no lo sé quisás quiere saber si tiene vista de rayos X, o cree que viendote fijamente tiene un detector de mentiras; ¿no será pariente de Chiche Gelbung?, y si sos la muchacha seguro tu primera vez fue a mitad de la noche escabullida para no ser oida, un día conocíste a ese señor que roncaba y la mujer de ruleros, justo cuando cumpliste 6 u 8 meses de ir a mitad de la noche (y bueno amor los hoteles estan caros para las necesidades de hoy)
¿Pero… Y nosotros, que estamos de este lado del microfono?, nos estamos jugando del todo por agradarte, y si no cambiaste el dial en los primeros 15 segundos de este monologo editorial, entonces querras saber que te traen estos lunaticos a tu noche, a esa previa de una salida, o quisas te toque quedarte en tu casa por tener que estudiar o por que no tenes con quien salir, pero no olvidemos a los que trabajan en otros horarios, esas personas que siempre estan con el oido pegado a la radio y las manos en su trabajo.
Aca estamos para ofrecerte dos horas de diversión, buena música, y muchas sorpresas, en este no-programa de radio llamado “Siempre hay un pero”, a si que no te vallas porque lo que viene a continuación será una primera vez de película.
Fernando Marzini
Las cosas a veces no son tal y como las imaginamos, que sabemos si esa chica tan bonita que hablaste desde el Patio Civico hasta 7 y 48, no tiene las uñas largas, se baña dos veces a la semana, y tiene el mal habito de reventar los granitos de las personas que tiene alrededor.
O ese pobre chico que esta ahí sentado que pareciera que nunca le pasa nada interesante, quien te dice que ese chico sabe hacer mas cosas que Mac Giver atado a una silla. Si las apariencias engañan, pero para ello nosotros nos hemos esforzados para que nuestra primera vez con ustedes sea la mejor posible, dentro de lo que hay obvio.
La primera vez en cualquier persona es el momento más duro que atravesamos, sea en el area que sea. La primera ves que se te cae un diente es un suceso doloroso, pero recompensado por ese Ratón Perez, que si le dejas un diente te deja una moneda debajo de la almohada; lastima que ya no me quedan dientes, y la última noche el ratón me dio vuelta la casa de arriba abajo porque no tenía ningun diente.
La primera vez que te toca hacer un trámite solo, y te topas con una peregrinación de gente haciendo colas de gusto, es un momento feo. Y la primera vez?... Si saben de que primera vez hablo, una descicion importante y que lo fueras, hasta que simplemente pasa ese momento, que le digo?, me dejo las medias?, pero… hay me transpira la mano, porque comi panchos con picante, si le doy un beso la mato por intoxicación. Estas son cosas que nos preguntamos a diario, pero como gente con cancha jamás vamos a reconocerlo, aunque estemos sudando miedo y nuestras patas tiemblen que nosotros reconoscamos nuestros miedos es tarea imposible.
Inventamos las cosas más extravagantes con tal de ser vistos, compramos las mejores marcas, andamos en rodados lujosos o tuneados, y si es necesario peinamos nuestro pelo y nos afeminamos un poco para parecer sensibles… si sensibles! Ese pilar de 120kg grande como una heladera con freezzer, que veias riendose mientras le pisaba la cabeza a un pobre pibe que mide metro y medio y pesa 60kg, es capas de llorar arrastrase con tal de que esa chiquilla diga Ah pobresito!, y ahí zas al cogote cual vampiro a sacarle lo que fuera.
Y cuando es una cita a ciegas?, aca viene lo divertido: “¿Qué tenes puesto?, Hay que sensible que sos (el Pilar sigue robando con eso), me encanta hablar con vos… todo eso termina esa primera vez, como si fuera el programa de Cupido uno pone dia, lugar, hora y planifica todo, a veces viene acompañado, para hacerse el boludo en caso de encontrarse con el Yeti o con Mangila Gorila, de golpe el que se llamaba Cacho puede llamarse Ruben en un santiamen y vicebersa, ese si que es un momento de nervios.
Otra clásica: el día que conoces o presentas al noviecito/a a tus padres, ¡Qué momento!, por dios, cuantos nervios, cuanto protocolo, mientras amasamos ese gas que te produjo el guiso imundo de tu suegra, porque tu suegro te clavó la vista y no quiere dejarte de ver, no lo sé quisás quiere saber si tiene vista de rayos X, o cree que viendote fijamente tiene un detector de mentiras; ¿no será pariente de Chiche Gelbung?, y si sos la muchacha seguro tu primera vez fue a mitad de la noche escabullida para no ser oida, un día conocíste a ese señor que roncaba y la mujer de ruleros, justo cuando cumpliste 6 u 8 meses de ir a mitad de la noche (y bueno amor los hoteles estan caros para las necesidades de hoy)
¿Pero… Y nosotros, que estamos de este lado del microfono?, nos estamos jugando del todo por agradarte, y si no cambiaste el dial en los primeros 15 segundos de este monologo editorial, entonces querras saber que te traen estos lunaticos a tu noche, a esa previa de una salida, o quisas te toque quedarte en tu casa por tener que estudiar o por que no tenes con quien salir, pero no olvidemos a los que trabajan en otros horarios, esas personas que siempre estan con el oido pegado a la radio y las manos en su trabajo.
Aca estamos para ofrecerte dos horas de diversión, buena música, y muchas sorpresas, en este no-programa de radio llamado “Siempre hay un pero”, a si que no te vallas porque lo que viene a continuación será una primera vez de película.
Fernando Marzini
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